Mulier, mulieris

El MUA (Museo de la Universidad de Alicante) ha celebrado la VI convocatoria de Artes Plásticas, Mulier Mulieris, en honor al Día Internacional de las. Es una plataforma para dar rienda suelta a interpretaciones y reflexiones del espectador sobre la realidad de la mujer, vista desde el punto de vista de la creación artística.

Aunque no pude asistir a contemplar esta exposición, he ido informándome de la misma, tanto por medio de mis compañeros como de Internet, y he podido comprobar que fue una exposición muy interesante. Si mal no recuerdo, el año pasado se hizo una exposición con el mismo nombre a la que sí asistí. Dudo que las obras expuestas fueran las mismas, pero supongo que la sensación que otorgaba era parecida.

En esta exposición se podían observar obras dedicadas a la mujer o basadas en la misma, ya fuera en contra del machismo o resaltando la belleza de la figura femenina. Nunca había asistido a una exposición que se centrara en un tema tan concreto como este, y fue de mi agrado porque, aunque fueran sobre el mismo tema, había obras de diversas categorías (vídeos, escultura, pintura, fotografía, etc...), y el paseo observándolas no se hacía nada monótono.

  

 

  

Título: Al otro lado de la ventana

Técnica: Grafito, lápiz color y aerosol

Soporte: Madera

Esta pieza causa una gran impresión en el espectador al primer vistazo. Y eso, ¿por qué? Pues bien, resulta que ese ojo que nos mira fijamente, nos llama a observar el resto del cuadro. Además, el hecho de que sólo se vea un trozo de la protagonista, nos crea una especie de angustia, ya que nuestro cerebro siempre quiere terminar las obras incompletas.

El punto focal de la obra es el ojo de la mujer que, al no estar justo en el centro delimitado por el eje geométrico de la imagen, crea una tensión que atrapa al espectador y le conduce a seguir recorriendo el cuadro con la mirada.

El dinamismo de la escena es sobrecogedor. Entre el contraste rojo/azul, rompiendo la armonía, por así decirlo, y la fuerza de ese brazo incómodo, formando unas diagonales que llenan de vida el cuadro, se forma una imagen del todo dinámica. Y todo gracias a las líneas. La línea recta que parte el cuadro en dos, tanto en composición como en color, y las diagonales de las que hablaba que forma el brazo, son las protagonistas de la obra sin ninguna duda.

Además, podemos observar una clara simetría entre el brazo y la cabeza de la mujer, lo cual proporciona orden a la obra, además de hacerlo más fácil de mirar.

Autor: Sandra Fernández Martínez